En la continua búsqueda para sanar mi psique, mis emociones, encontré muchos artículos de universidades, y testimonios que afirman que la #psilocibina es uno de los compuestos químicos que podrían curar la depresión, ansiedad, adiciones y otras afecciones psicológicas, así que decidí probar, pues tengo una larga historia de lucha contra la depresión y ansiedad. Siento qué hay un gran estigma todavía en el uso de psicodélicos, y me siento insegura al compartirlo, pero quiero contribuir a la erradicación de este estigma, puesto que me ha ayudado como ningún otro método en este camino tan difícil. Recientemente tuve una epifanía, estando bajo el efecto de la microdosis, pensé: ¿Porqué tengo la necesidad de la validación de otros? ¿Cómo se sentirá ser tu propio amor de la vida? ¿Como puedo darme ese #amor que tanto necesito? Sé que está en mí, sólo que no sé cómo hacerlo.. y en eso hice “click” Entendí que ya me lo daba, que cada vez que yo hacia arte, era un regalo y una muestra de afecto para mí misma, por el simple hecho de darme algo bello, con #color. Pensé en todas mis pinturas que, aunque no son perfectas, me encantan y me siento orgullosa de haberlas hecho. Y lloré, entendí que esa es mi forma de amarme, aceptarme, validarme y obsequiarme algo bello. Es algo alucinante pues me es muy difícil ponerme primero, darme prioridad, expresarme amor, cuidar de mí, y el darme cuenta que siempre me lo he dado fue catártico y muy sanador, un mensaje de mí Yo superior o del futuro diciéndome “Siempre he visto por ti, nunca has estado sola”. Esta mascada la hice en honor a la psilocibina, a las plantas/hongos/animales de poder, que por años me han enseñado a pensar desde el amor y no desde el miedo, y que ahora me están ayudando tanto a erradicar patrones de pensamiento y de comportamiento tóxico a través del amor propio y a los demás, hay un largo camino que recorrer, pero siento que estoy en el correcto.